Reconociendo mi poder
Texto y autorretrato Kathe Romero
Por muchos años tenía una pelea con mi cuerpo, lo critique muchas veces pensando que hacía lo “correcto” por seguir patrones o estándares de lo que era la belleza femenina. Hacía ejercicio o iba a un gimnasio escuchando mi mente que se había creado diálogos de lo que era tener un cuerpo “perfecto o deseable”, jamás me escuchaba, me culpaba horrible cuando comía de más, me sentía mal por disfrutar de una pizza o un postre cuando en ese momento mi cuerpo lo único que pedía era que saboreara con ese placer absoluto que genera comer lo que más te gusta! No hay nada que nos separe más de nuestra esencia y nuestro ser que la autocrítica, nos lastima, nos invalida, nos va arrancando poco a poco el poder y la energía con la que nacimos.
Nuestra energía creadora, mujeres, es poderosa y eso no te lo da unas tetas, un culo grande o unas piernas sin celulitis, según como el patriarcado o sociedad nos hacen creer desde que vamos creciendo, en la TV, redes, internet, revistas, comentarios de tu misma familia, etc. Te crea un lucha constante con tu cuerpo, y nunca estas satisfecha, ¡nunca!
Hace un año y medio tomé la decisión de escucharme, de escuchar mi cuerpo, preguntarle que le gusta, como se siente bien él, si hoy quiere descansar o quiere hacer deporte, si quiere comer verdura o simplemente disfrutar un delicioso postre. Tome la decisión de silenciar lo externo, de callar esa bulla esas voces que te crean una batalla con lo más hermoso que te mantiene en este dimensión terrenal: ¡tu cuerpo! Carajo…somos hermosas, nuestros cuerpos son perfectos porque son únicos, no hay otro igual al tuyo, ¡no lo hay! Cada vez que te mires al espejo dile palabras lindas, coquetea contigo, así al principio tu mente batalle con lo que esta viendo, porque para el ego siempre hay crítica siempre quiere mas, pero tu ser y tu esencia es poderosa. Al final te convencerás ciegamente de lo perfecta que eres tanto física como interiormente.
Que viva el amor propio, ese amor real que nos hace vibrar y ser completas. Necesitando solo de nuestra aprobación, solo de nosotras mismas!
Mujeres no es que tan voluptuoso o delgado sea el cuerpo lo que lo hace irresistible, es la confianza con la que se habita la propia piel.
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