Alcemos las alas
La danza, como sabia utopía, me ha regalado preguntas constantes, una de ellas es el cuerpo, sí, la existencia misma, la materialidad de mi sentir y mi pensar, la talla de lo que ha sido mi camino, la imprenta de mis dolores, mis angustias, mis alegrías infinitas y mi voluntad.
Me confronta profundamente la violencia que recibimos las mujeres, la violencia que encarnamos. Nos cosifican, nos mercantilizan, nos deshumanizan, nos utilizan, nos sexualizan. Nuestros cuerpos cargan con tabúes, vergüenzas innecesarias, heridas que se convierten en odio y desamor.
El sistema encuentra las formas de mantenernos deshumanizadas. Necesitamos abrazarnos, soltar cargas, sacar fuerza, alzar vuelo. Me invito a resistir, nos invito a transformar, las invito a gritar y tumbar las podridas estructuras que nos sujetan así. Vamos a metamorfosearnos.
Texto y modelo Dana Corredor Silva | Fotografía Julián Rodríguez C.
Seguimos manteniendo la intención del proyecto para que cualquier mujer pueda participar, reconocerse, verse con más confianza, olvidar los complejos y amarse de verdad.
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