No sé que haría en esta vida sin amigas, sin hermanas, sin madres, sin ancestras…

Ha sido de la mano de varias mujeres que he aprendido asuntos vitales de este mundo. Un mundo donde se nos acostumbraba a competir entre nosotras, obligadas a la sumisión por décadas, temerosas de lo que somos, avergonzadas de nosotras mismas y de nuestro poder y autenticidad; pero hoy levantamos la voz, nos reivindicamos, ¡hoy somos mas fuertes! Ya no hay competencia, somos equipo, un solo bando.

Agradezco a estos tiempos modernos que nos ha permitido cuestionar nuestras relaciones, como y porque existe tal patrón negativo en la mayoría de relaciones interpersonales entre mujeres, esa rivalidad y envidia enseñada por la cultura, olvidando que somos hermanas. Ahora brillamos juntas, comprendimos que somos hijas de la misma tierra, yo te cuido tanto como tu a mi, te respeto, te atesoro, mi alma venera la tuya… por ello, hoy me siento feliz de saber que cuento conmigo, que me tengo a mi y mi única competencia soy yo misma, y que si me siento sola, estarás tu mi amor, mi amiga.

Me siento tan plena cuando compartimos sin hostilidades nuestras cualidades y bellezas, me gusta hacerte sentir la mujer mas extraordinaria, guapa y luchadora y que por eso te mereces todo el amor, me gusta cuando en mis días de existencialismo sin comentarios agobiantes me abrazas, me acompañas. En ti me refugio, estando contigo me siento respaldada y encuentro paz, compartiendo como una amiga, hermana, madre y compañera.

Me gusta ser sincera y transparente, mostrarme frágil y desnuda en todos los sentidos, porque me respetas, me quieres con bondad y comprensión, porque somos compañeras de la vida, somos apoyo importante de nuestros caminos. Contigo supero mis miedos, me vuelvo valiente, haces que me acepte y sienta admiración por mí. Gracias compañera por permitirme brillar junto a ti, por ser luz conmigo, gracias por la complicidad y la reciprocidad.

Si te sientes sola, cuenta conmigo… soy tu amiga, soy tu hermana.

Modelos y texto Alexandra y Jhesleinny | Fotografía Julián Rodríguez C.